Te cuento algunas cosas que no supe cuando estuve embarazada y que hubiese sido fácil hacer. Ser madre consciente es hermosamente respetuoso con el ser que viene a cumplir el rol de tu hijo/a en esta tierra. No es de tu propiedad, no viene vacío para que lo llenes. Es un ser que merece respeto y tiempo de amor para que su llegada al mundo sea hermosa.